Pintor, escultor y grabador, es uno de los artistas vascos actuales de mayor proyección internacional. En 1972 termina los estudios de arquitectura en Pamplona, aunque para entonces ya había expuesto alguna vez. Durante esa época viaja mucho por Europa, Turquía y África conociendo las tendencias artísticas imperantes en el momento.
Tras terminar la carrera se interesa por la técnica del grabado y conoce a Chillida, quien será clave en su trayectoria, aunque la obra de Nagel se puede etiquetar como figuración postmoderna, con influencias del pop art en el tratamiento de los colores, del surrealismo en su concepto y del arte povera por el uso de materiales pobres. Su obra se caracteriza por la experimentación con técnicas, lenguajes estéticos y materiales distintos como el plomo, luz fluorescente, poliéster, fibra de vidrio… y al mismo tiempo una clara tendencia a la fusión de formatos combinando, por ejemplo, escultura y pintura.
En el año 2006, tras la exposición en el Kursaal de San Sebastián, Andrés Nagel anuncia su decisión de retirarse, al menos durante una temporada.